Talleres de atención psicológica dirigido a hijos e hijas de mujeres víctimas de violencia basada en género
Casa de la Mujer de la Unión lleva adelante desde el año pasado un proyecto de atención dirigido a niños y niñas, hijos de mujeres que han sido víctimas de violencia basada en género. El espacio de encuentro tiene dos grupos, que se dividen según edades de los niños y las niñas: uno es de 6 a 9, y el segundo es de 9 a 12 años.
El taller nació a instancia de un grupo de mujeres del la zona del Municipio G, que desde hace más de 25 años trabajan de forma comunitaria en el territorio. Ellas notaron que los hijo/as de las mujeres que iban a atenderse en los servicios de Comuna Mujer, no eran ajenas ni ajenos al círculo de violencia en el que se encuentran sus adultos responsables. Y por eso fue que pensaron en la generación de un espacio donde los niños y las niñas pudieran trabajar las problemáticas referidas a la violencia.
Este taller busca ser un lugar donde los niños y niñas puedan expresar las situaciones que han vivido a través de diversas técnicas que brinden la posibilidad de expresar los que sienten a través de dibujos, cantos y también de charlas. La idea es poder mostrarles que la violencia no es normal ni natural, y que un vínculo saludable en la familia es posible.
Las psicólogas que trabajan con estos niños y niñas apuntan a crear un espacio de respeto colectivo, donde se puedan generar condiciones para que los niños expresen sus problemáticas. Por eso es que el grupo es cerrado, es decir luego de unas semanas de trabajo ya no se reciben nuevos niños a los grupos. Si bien el método de trabajo es grupal, se hace foco también en situaciones personales, con los niño/as y también con las madres.
Se evalúan resultados positivos
El equipo de trabajo, las madres y también las maestras de los niños y la niñas han evaluado de forma muy positiva el taller psicoterapéutico. Los niños han logrado identificar conductas agresivas de sus compañeros de escuela, además los rendimientos escolares de algunos de los participantes mejoraron significativamente. Chico/as que estaban con problemas de conductas y por repetir su año escolar, lograron ser promocionado/as.
Este taller se piensa con una lógica de prevención de la violencia. Para el equipo que lleva adelante el espacio una de las formas de trabajar la violencia basada en género es construyendo espacios de convivencia sanos con las generaciones más jóvenes. Los niños y las niñas pueden llegar a ser multiplicadores de hábitos de socialización sanos en sus entornos.